El sector energético en España para 2026

El sector energético en una transición acelerada

El sector energético atraviesa una de las etapas de transformación más profundas de las últimas décadas. El progresivo uso de la Inteligencia Artificial, el almacenamiento de datos en la nube y la electrificación de la movilidad están generando una demanda energética sin precedentes. A esto se suma la automatización industrial y la expansión de energías renovables, lo que ha creado un desfase estructural entre capacidad instalada y consumo proyectado.

Este escenario impulsa la necesidad de inversión, eficiencia y talento especializado capaz de gestionar una red más compleja, descentralizada y digital.

¿Cómo es la situación del sector en España?

España se posiciona como uno de los mercados más dinámicos del entorno europeo. Con más de 100.000 personas empleadas en el sector energético y un crecimiento del 11,1 % en 2025, el país se consolida como referente en renovables, hidrógeno y digitalización.

Sin embargo, el liderazgo viene acompañado de presión, la velocidad de ejecución exigida por los objetivos obliga a las empresas a innovar y optimizar su estructura de talento. El desafío no está solo en invertir, sino en ejecutar con agilidad y conocimiento especializado.

España tiene la oportunidad de ser líder en transición energética si logra sincronizar inversión, innovación y talento

El desafío humano: talento y competitivad

Desde nuestra división especializada en energía, observamos que el gran reto del sector ya no es tecnológico, sino humano. Nuestros consultores, que trabajan cada día junto a empresas líderes del sector, nos trasladan una preocupación común, la dificultad para atraer y fidelizar el talento especializado que necesitan para afrontar los proyectos actuales.

Capitales y actores clave:

La transición energética en España avanza gracias a la interacción de tres factores estratégicos que se analizan en el informe, destacando:

• Inversión internacional. 
• Regulación y política nacional. 
• Innovación tecnológica. 

El éxito de esta transición dependerá de la capacidad de las organizaciones para integrar de manera efectiva estos tres ejes y convertirlos en proyectos estratégicos que impulsen el futuro energético del país.

El sector energético español vive un momento decisivo. Su crecimiento y capacidad de innovación son evidentes, pero el verdadero diferencial estará en cómo las empresas gestionen su capital humano.

Desde Robert Walters, hemos elaborado un informe ejecutivo en formato one-pager, respaldado por el conocimiento de nuestros expertos especializados exclusivamente en energía, que recopila los datos clave y las perspectivas que marcarán el sector en 2026.